El embarazo es un periodo crucial en la vida de una mujer, marcado por cambios físicos, emocionales y nutricionales significativos. Durante esta etapa, es fundamental prestar especial atención a la dieta para garantizar el adecuado desarrollo del feto y mantener la salud materna.
Para la nutricionista Carolina Vélez el embarazo es el momento de mayor requerimiento nutricional para las mujeres, y es esencial consumir alimentos de alta calidad, como el huevo, que proporciona proteínas, vitaminas y minerales necesarios para satisfacer las necesidades nutricionales incrementadas durante esta etapa crucial.
“Durante el embarazo, la demanda de proteínas aumenta significativamente para sostener el crecimiento y desarrollo adecuados del feto, así como para el incremento del tejido materno. El huevo, con su contenido de proteínas de alta calidad, proporciona todos los aminoácidos esenciales necesarios para la síntesis de tejidos, ayudando así a promover un desarrollo óptimo del bebé en gestación”, afirma Vélez.
Asimismo, el huevo es una fuente concentrada de nutrientes esenciales como ácido fólico, vitamina D y hierro, fundamentales para el desarrollo óptimo del feto y la salud materna. La experta destaca que el ácido fólico previene defectos del tubo neural y la vitamina D contribuye al desarrollo óseo. Además, el hierro ayuda a prevenir la anemia y asegura un suministro adecuado de oxígeno tanto para la madre como para el bebé.
Finalmente, se recomienda consumir entre 1 y 2 huevos al día, alrededor de 7 a 8 unidades por semana, ya que es una excelente fuente de ácidos grasos saludables que son esenciales durante el embarazo. Además de su destacado perfil nutricional, esta proteína animal es versátil y fácil de integrar en la dieta diaria. Desde revueltos hasta cocidos, pasando por tortillas y ensaladas, las posibilidades para disfrutar de este superalimento son infinitas. Incluir huevo en la alimentación diaria puede tener un impacto significativo en el bienestar tanto de la madre como del bebé en crecimiento.